EE. UU. abre plano o al alza mientras inversionistas balancean ganancias, geopolitica y un gobierno paralizado
La apertura del viernes en Wall Street transcurrió con moderación, un reflejo de la tensión que viven los mercados ante dos frentes: la prolongada paralización del gobierno federal y los avances recientes en el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás.
A las 9:30 a.m. ET, el Dow Jones avanzaba 0,28 %, impulsado por empresas con exposición directa a gasto discrecional, como Disney, que subía más de un 1 %. El S&P 500 subió 0,13 %, mientras que el Nasdaq 100 permanecía más estable. En el mercado cambiario, el euro cotizaba plano frente al dólar, alrededor de 1,15665 a esa hora.
Esa calma refleja la prudencia de los inversores: están evaluando si la liquidez, las apuestas por estímulos monetarios y las noticias geopolíticas lograrán desequilibrar la balanza.
El cierre parcial del gobierno estadounidense, que lleva ya 10 días, añade una capa adicional de riesgo. Muchos reportes económicos clave —como el informe de nóminas no agrícolas— han sido pospuestos, limitando la visibilidad sobre el rumbo real de la economía. Esa falta de datos refuerza el nerviosismo.
Según Reuters, los fondos de renta variable de EE. UU. registraron salidas netas de 4.520 millones de dólares la semana que culminó el 8 de octubre, en parte producto de una toma de ganancias ante el contexto político incierto.
No obstante, los analistas de Invesco advierten que los cierres gubernamentales históricamente han ejercido un impacto limitado sobre las bolsas estadounidenses, sobre todo cuando los desacoples sectoriales son moderados. Morgan Stanley apunta en el mismo sentido: en múltiples shutdowns pasados, el S&P 500 incluso generó rendimientos positivos en promedio.
Geopolítica como motor: el alto el fuego y su efecto en mercados
En el plano internacional, la acompasada firma de la primera fase de un alto el fuego entre Israel y Hamás genera alivio en mercados asustados por la escalada en Oriente Medio. Reuters destaca que los mercados mundiales han mostrado una reacción volátil ante estos acontecimientos, especialmente a través del riesgo País y las acciones de defensa.
En los países del Golfo, los index bursátiles cerraron en terreno favorable, alentados por expectativas de cortes en tasas de interés estadounidenses y una menor prima de riesgo regional.
En materia energética, el precio del petróleo reaccionó con ligeras caídas, pues la reducción de tensión en Oriente Medio disminuye la prima de riesgo en los mercados petroleros.
Posibles escenarios y riesgos a observar
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Desenlace del shutdown: si Washington resuelve pronto el estancamiento, podría liberar datos clave y mejorar el ánimo inversor. Pero cualquier extensión prolongada podría afectar gastos federales, contratistas y la confianza empresarial.
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Flujos de capital: mientras algunos inversionistas salen de dividendos o acciones más especulativas, otros refuerzan posiciones defensivas. La diversificación y el control de riesgos se vuelven aún más vitales.
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Persistencia geopolítica: aunque el alto el fuego es un paso, la estabilidad depende de implementación real. Si reaparecen tensiones o se extienden a otros focos regionales (Líbano, Irán), el impacto para mercados emergentes y commodities podría reactivarse.
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Política monetaria global: la posibilidad de recortes de tasas en EE. UU., combinada con decisiones de bancos centrales en otras latitudes, condicionará el apetito por activos de riesgo frente a refugios tradicionales.
La apertura de los mercados estadounidenses hoy es un reflejo del momento que atraviesan los inversores: entre optimismo contenido y cautela estratégica. Con un gobierno paralizado, datos económicos retenidos y una geopolítica más calmada (por ahora), los mercados navegan entre zona de espera e interpretación. Si triunfa la resolución política interna en EE. UU. y el acuerdo en Gaza se implementa con credibilidad, podríamos estar frente a una reactivación moderada. Pero el margen de error será estrecho y el control de riesgos, esencial.