El IBEX 35 pierde los 16.000 puntos en una semana de aversión al riesgo: IAG y la banca lideran las caídas, Amadeus y Repsol resisten
El IBEX 35 cerró la jornada de este viernes con una caída del 1,34%, hasta los 15.901 puntos, y acumuló un retroceso semanal del 0,82%, en una semana dominada por la aversión al riesgo global y el nerviosismo de los inversores ante las valoraciones tecnológicas y la incertidumbre económica.
Entre los valores más castigados destacaron IAG, que se desplomó un 11,49%, su peor sesión desde abril, tras presentar unos resultados peores de lo esperado y verse afectada por la debilidad de las rutas del Atlántico Norte y el tipo de cambio. La reacción fue considerada “excesiva” por algunos analistas, que recuerdan que la aerolínea llegaba con una revalorización acumulada del 87% en el año.
El sector bancario también sufrió fuertes ventas: Banco Sabadell cayó un 2,9%, Unicaja un 2,6%, BBVA un 2,59% y CaixaBank un 2,44%, en medio de la corrección generalizada en los mercados europeos. Cellnex, pese a presentar resultados sólidos, retrocedió 0,5%, lastrando al índice.
En contraste, las mayores subidas se registraron en Amadeus, que avanzó 1,55% gracias al buen recibimiento de sus resultados —con un beneficio neto que crece un 10%, hasta los 1.088,2 millones de euros—. También cerraron en positivo Indra, ArcelorMittal, Repsol y Acerinox, todas con ganancias superiores al 1%. Entre los grandes valores, Telefónica, que había perdido cerca del 17% semanal por su plan estratégico y el recorte del dividendo, logró estabilizarse y subir un 0,36% este viernes.
Un contexto global dominado por el miedo al riesgo
El mal tono de los mercados europeos se agravó por el retroceso en Wall Street, donde el Nasdaq se dirige a cerrar su peor semana desde abril. El temor a que las acciones tecnológicas y de inteligencia artificial estén sobrevaloradas ha disparado la aversión al riesgo, provocando ventas masivas en los valores de crecimiento.
La situación se complicó tras conocerse los malos datos macroeconómicos en Estados Unidos. El índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan cayó a 53,1 puntos, frente a los 53,6 previstos y los 51,5 del mes anterior, marcando su nivel más bajo en tres años. Además, el indicador de expectativas a futuro mostró un deterioro notable, reflejando el creciente pesimismo de los consumidores estadounidenses.
El cierre prolongado del Gobierno federal, que ya es el más largo de la historia del país, ha bloqueado la publicación de los datos oficiales de empleo, incrementando la volatilidad en los mercados y favoreciendo una huida hacia activos refugio como el dólar y los bonos del Tesoro.
Visión de los analistas: corrección necesaria, no fin de ciclo
Craig Johnson, analista de Piper Sandler, considera que los principales índices “enfrentan presión vendedora”, pero recomienda mantener una visión prudente y buscar oportunidades tras una corrección que considera “saludable dentro de un mercado aún alcista”.
En la misma línea, Tony Pasquariello, de Goldman Sachs, definió la situación como “una fase de debilidad dentro de una tendencia general alcista”. Según el experto, el movimiento actual no implica el fin del ciclo, sino un ajuste lógico tras meses de subidas intensas.
Balance final de la semana
El IBEX 35 cierra por debajo de los 16.000 puntos, afectado por el desplome de IAG, la corrección de la banca y la presión internacional. Telefónica consigue un leve respiro tras días de castigo, mientras que Amadeus se consolida como el valor más sólido de la sesión.
En el panorama global, la aversión al riesgo se impone. Los inversores se refugian en el dólar, los bonos y el oro, a la espera de que la próxima semana aporte claridad sobre los datos económicos y una posible estabilización de los mercados.
