Marvell y Carvana calientan la previa del S&P 500: el mercado apuesta por nuevos pesos pesados tecnológicos
La carrera por entrar en el S&P 500 se anima. La firma de inversión Stephens sitúa a Marvell Technology y Carvana entre las principales candidatas a incorporarse al índice de referencia de Wall Street, junto a nombres como CRH, Vertiv, Alnylam o Ares Management. La decisión, que podría conocerse el viernes, llega en un momento de mercado sensible a los movimientos de los grandes índices y al peso creciente del sector tecnológico.
Marvell y Carvana, en la pole del S&P 500
Según una nota de la analista Melissa Roberts, de Stephens, dos de los nombres con más opciones de entrar en el S&P 500 son Marvell Technology (MRVL) y Carvana (CVNA). S&P Dow Jones Indices podría anunciar nuevas inclusiones y exclusiones del índice a última hora del viernes, en una actualización que el mercado sigue muy de cerca por su impacto potencial en los flujos de inversión de fondos indexados y ETFs.
Roberts subraya que Marvell, compañía de semiconductores y soluciones de TI, ha registrado beneficios GAAP positivos y cumple ya el requisito de viabilidad financiera que exige el comité del S&P. Además, destaca que es “la mayor de las nuevas incorporaciones elegibles por capitalización bursátil”, ligeramente por encima de Carvana y CRH.
El músculo de Marvell: más ingresos y compra de Celestial AI
El impulso de Marvell no llega solo por tamaño. La empresa ha comunicado esta semana que espera unos 10.000 millones de dólares de ingresos en su próximo ejercicio fiscal, apoyada en un crecimiento del 25% en su negocio de centros de datos, uno de los segmentos más calientes del mercado gracias a la inteligencia artificial y la demanda de computación avanzada.
Además, la compañía ha anunciado la compra de la startup de semiconductores Celestial AI en una operación valorada en 3.250 millones de dólares, reforzando su posicionamiento en hardware avanzado para IA. Este tipo de movimientos estratégicos la convierten en un candidato “natural” para un índice cada vez más dominado por tecnológicas ligadas a la nube, los datos y la inteligencia artificial.
Carvana y el resto de aspirantes
En paralelo, Carvana, la plataforma online de compraventa de coches usados, también se coloca entre las grandes aspirantes. Tras un periodo de extrema volatilidad y dudas sobre su modelo de negocio, su recuperación bursátil y su tamaño de mercado la colocan ahora en el radar del comité del S&P 500.
Junto a Marvell y Carvana, Stephens también menciona a CRH Plc (CRH) como posible candidato, así como a Vertiv Holdings (VRT), Alnylam Pharmaceuticals (ALNY) y Ares Management (ARES). Todas ellas se encuentran entre las mayores compañías estadounidenses que todavía no forman parte del índice.
Roberts apunta también a MicroStrategy (MSTR) como una empresa que se acerca a los primeros puestos de la lista por capitalización, aunque le asigna una “probabilidad menor” de ser incluida, en parte por su perfil particular muy ligado al bitcoin.
Por qué importa entrar en el S&P 500
La inclusión en el S&P 500 no es solo un reconocimiento simbólico: significa visibilidad global y flujos automáticos de capital. Millones de inversores en todo el mundo replican el índice a través de fondos indexados y ETFs, lo que obliga a estos vehículos a comprar las acciones de los nuevos componentes cuando se actualiza la composición.
Ese efecto “entrada en índice” suele traducirse en aumentos de volumen y, en muchos casos, en presión compradora adicional a corto plazo. De ahí que el mercado siga con lupa cada revisión y trate de anticipar quiénes serán los próximos ganadores.
En esta ocasión, el foco está puesto en Marvell y Carvana, dos nombres que simbolizan bien el momento actual del mercado estadounidense: tecnología, datos, consumo digital y modelos de negocio que han sobrevivido a la prueba de fuego de los últimos años y aspiran ahora a consolidarse en el escaparate de las 500 grandes de Wall Street.
