Rebelión en el Pentágono: periodistas abandonan la sala tras nuevas reglas de censura impuestas por Hegseth
Caos en el Pentágono. Los principales periodistas de defensa de Estados Unidos abandonaron la sede del Departamento de Defensa después de que el secretario Pete Hegseth impusiera nuevas normas que obligaban a los reporteros a firmar una política de medios. La medida ha sido calificada como “un día oscuro para la libertad de prensa” por la Asociación de la Prensa del Pentágono.
El ambiente se tensó este miércoles en el Pentágono cuando los periodistas acreditados decidieron abandonar la conferencia de prensa tras la imposición de un nuevo protocolo de comunicación. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth —también conocido por su título formal de Secretario de Guerra—, exigió que todos los reporteros firmaran una política de medios antes de continuar cubriendo las actividades del Departamento de Defensa.
Según la Asociación de la Prensa del Pentágono, el Departamento comenzó a retirar las acreditaciones de casi todos los principales medios estadounidenses después de que los periodistas se negaran a firmar el documento. La asociación emitió un comunicado en el que denunció que esta medida representa “un día oscuro para la libertad de prensa” y advirtió que las nuevas reglas podrían vulnerar el principio de transparencia y rendición de cuentas del gobierno.
El texto de la política en cuestión no ha sido divulgado públicamente, pero, de acuerdo con fuentes cercanas a la prensa acreditada, podría incluir cláusulas que permitirían al gobierno restringir la publicación de información relacionada con la seguridad nacional. Los reporteros argumentan que aceptar tales condiciones los expondría a posibles sanciones o procesos judiciales simplemente por realizar su labor informativa.
Esta situación marca uno de los enfrentamientos más tensos entre el Pentágono y los medios de comunicación en los últimos años. La decisión de Hegseth de endurecer las reglas para los periodistas llega en un momento de alta sensibilidad política y militar, donde la transparencia y la información independiente resultan esenciales.
El choque entre el Pentágono y la prensa estadounidense abre un debate crucial sobre los límites entre la seguridad nacional y la libertad de información. Mientras el Departamento de Defensa defiende la necesidad de proteger datos sensibles, los periodistas alertan sobre el peligro de instaurar un precedente de censura. Lo ocurrido este miércoles podría marcar un punto de inflexión en la relación entre el poder militar y los medios en Estados Unidos.