Venezuela responde a EEUU: "El narcotráfico no se combate con destructores o misiles"
En medio de la escalada de tensiones diplomáticas, el ministro de Defensa de Venezuela ha criticado duramente el uso de un vasto despliegue militar por parte de Estados Unidos para combatir el narcotráfico, calificando la estrategia de "absurda". Esta declaración resalta la creciente fricción en las relaciones bilaterales, con ambos países enfrentando posturas opuestas sobre cómo abordar el problema del narcotráfico.
La relación entre Venezuela y Estados Unidos sigue siendo un tema central en la agenda geopolítica, especialmente tras el reciente anuncio de Washington sobre el despliegue de destructores y misiles en el Caribe sur, bajo el pretexto de combatir el narcotráfico. Este movimiento ha provocado una feroz reacción por parte del gobierno venezolano, que considera este tipo de medidas como inadecuadas e incluso contraproducentes.
Vladimir Padrino López, Ministro del Poder Popular para la Defensa de Venezuela, calificó de "absurda" la decisión de Washington de emplear destructores y misiles para enfrentar el narcotráfico en la región. En un video que rápidamente se viralizó en redes sociales, Padrino López destacó que un despliegue de tal magnitud, con armas de alta tecnología, es desproporcionado para enfrentar una problemática que, según él, debe ser abordada desde una perspectiva más estratégica y menos militarizada.
"El narcotráfico no se combate con destructores, ni con misiles, ni con nada de eso. Esa es la narrativa de ellos", comentó el ministro. Su crítica apunta a la desmesura de utilizar armamento pesado para un problema que, en su opinión, debe ser tratado a través de otros medios, como la cooperación internacional y el fortalecimiento de las políticas nacionales de seguridad.
Este enfrentamiento verbal es solo el último capítulo de una serie de tensiones diplomáticas que han marcado las relaciones entre ambos países en las últimas décadas. Mientras que Estados Unidos justifica su despliegue militar como una medida necesaria para frenar el tráfico de drogas que afecta a toda la región, Venezuela insiste en que la solución debe basarse en una comprensión más profunda de las raíces del narcotráfico, que van más allá de la simple intervención militar.
En este contexto, las diferencias entre ambos gobiernos siguen siendo un desafío para la estabilidad regional y continúan generando preocupación en los actores internacionales que observan con atención la evolución de esta crisis diplomática.
