Increíble: gastar más de 16.000€ solo en memoria RAM para un ordenador, y con descuento
Cuando en un hilo de Reddit la gente empieza a bromear con cambiar un módulo de DDR5 de 64 GB por un piso en Cádiz… es que algo muy serio está pasando en el mercado de la memoria. Entre chistes y memes, la comunidad tech española está describiendo, en realidad, una tormenta perfecta: precios disparados, falta de stock, especulación en marketplaces y una demanda insaciable ligada a la inteligencia artificial.
De “ofertón” a 6.000 € el kit: la RAM se vuelve artículo de lujo
El hilo arranca con lo que parece una simple captura de precio absurdo: un módulo de RAM a miles de euros y, al lado, un “descuento” de más de 3.000 euros que se muestra como si fuera una ganga. Algunos reaccionan con sarcasmo:
“Broma?? Si es un ofertón!! Mira qué pedazo de descuento”
“Precio mínimo histórico”
Otros no se lo toman a risa: hablan de fallo de precio, de stock cero maquillado con cifras imposibles o de estrategias para mantener el producto catalogado… pero imposible de comprar.
En paralelo, aparecen las historias personales que ponen contexto al drama:
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Gente que compró 96 GB de DDR5 por 300 € hace unos meses y ahora ve cómo un solo módulo se vende por 1.500 €.
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Usuarios que dicen en broma que van a meter el PC en una caja fuerte porque su RAM “vale más cada día”.
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Alguno sentencia: “la RAM ahora se cotiza al minuto como el oro”.
Entre la exageración y la realidad, el mensaje es claro: los precios se han ido a la estratosfera. Lo hemos comprobado y es verdad, como podemos ver en este enlace a una conocida tienda.
¿Culpa de la IA o de la avaricia de los fabricantes?
En el hilo se forma rápidamente un “debate económico” improvisado.
Un bloque de usuarios lo tiene claro:
“Bienvenido a la crisis de la RAM, todas las empresas que tengan algo relacionado con la IA están comprando todas las existencias”
Es la narrativa fácil: la IA se lo come todo. Centros de datos, GPUs, HBM, DDR5… cualquier cosa que tenga que ver con cómputo se va a los proyectos de IA generativa.
Pero enseguida llegan las réplicas más matizadas:
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Un usuario recuerda que uno de los grandes fabricantes ha dejado directamente de vender RAM al mercado doméstico para centrarse en clientes corporativos.
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Otro apunta a Micron cerrando Crucial, su marca de memorias de consumo, y a Samsung priorizando memoria para IA frente a sus propias divisiones de telefonía.
El diagnóstico que se impone es más duro:
“La crisis de la RAM no es porque las empresas de IA hayan arrasado el stock, sino pura avaricia de los fabricantes: ganan 4 veces más vendiendo a IA que al usuario doméstico.”
Es decir, la IA dispara la demanda… pero el cuello de botella real está en cómo los fabricantes redirigen la producción hacia donde el margen es más alto, dejando tirado al mercado de a pie. Y, de paso, sin ampliar fábricas: otro usuario recuerda que levantar nuevas plantas lleva años y nadie quiere jugarse miles de millones si la burbuja de la IA pincha.
Marketplaces, precios locos
Otro frente de debate nace cuando alguien señala que el producto no lo vende directamente el ecommerce, sino un tercero. Ahí se abre otro melón: el efecto marketplace.
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Varios lamentan que estas tiendas se hayan convertido en marketplace, con la sensación de que ahora hay que ir “con mil ojos” para no encontrarse con precios "absurdos, garantías confusas o vendedores opacos".
Los “locos” que ampliaron antes ahora parecen genios
La otra cara del hilo son los que compraron “de más” antes de que se liara:
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Uno cuenta que en plena paranoia de hace cuatro años montó 128 GB en el sobremesa, 64 GB en el portátil y varios SSD de varios teras. Ahora, dice, se alegra más que nunca de haberlo hecho.
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Otros trabajan con máquinas virtuales, edición de vídeo, simuladores de vuelo, y reconocen que han llegado a llenar 100 GB de RAM sin despeinarse.
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Y los hay que usan 64 GB para montar RAMdisks y hasta optimizar el desgaste de sus SSD.
En clave de humor, alguno se plantea vender la mitad de su RAM para comprarse una futura GPU tope de gama. Pero el trasfondo es serio: quien se aprovisionó antes ahora se siente blindado ante la tormenta de precios.
“Era de la IA”: resignación y miedo a 2026
El hilo se cierra con una mezcla de humor negro y fatalismo:
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“No, bienvenido a la era de la IA. Reza y con algo de suerte no irá a peor.”
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“Irá a peor.”
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“La broma va a ser para el que en 2026 se le muera la RAM…”
Algunos se consuelan pensando que, cuando la burbuja de la IA se estrelle, los precios de la memoria “bajarán en picado”. Otros creen que la escasez puede prolongarse si los fabricantes mantienen la producción orientada casi en exclusiva a grandes centros de datos.
Mientras tanto, una cosa queda clara leyendo a toda esta comunidad:
para el usuario doméstico, la RAM ha dejado de ser un componente más y se ha convertido en un activo volátil, casi especulativo, en plena economía de la IA. Y en ese contexto, ver un módulo de 64 GB a precio de coche usado ya no parece tanto una broma, sino el síntoma de un mercado que se ha desconectado de la realidad cotidiana.
