Donald Trump destituye a Lisa Cook de la Reserva Federal acusándola de fraude hipotecario
El presidente de Estados Unidos cumple su amenaza y anuncia la salida inmediata de Lisa Cook, gobernadora de la Fed, a quien acusa de falsedad en declaraciones hipotecarias. La medida reabre el debate sobre los límites legales para destituir a un miembro de la Reserva Federal.
Donald Trump ha vuelto a sacudir la política económica estadounidense. El presidente confirmó este martes el despido inmediato de Lisa Cook, una de las gobernadoras de la Reserva Federal y responsable directa de la política monetaria del banco central.
Según la versión de la Casa Blanca, Cook habría declarado de manera simultánea dos viviendas distintas como residencia principal, un hecho que Trump califica como fraude hipotecario. “Se trata de un comportamiento engañoso con posibles consecuencias delictivas”, subrayó el mandatario, que acusó además a Cook de negligencia grave en sus funciones.
El marco legal que regula la Reserva Federal, establecido en la Ley de 1913, estipula que un gobernador solo puede ser destituido por “causa justificada”. Sin embargo, la norma no define con precisión qué se entiende por este concepto. Este vacío abre la puerta a la interpretación política y jurídica, y plantea dudas sobre si la decisión de Trump se ajusta al espíritu de la ley o si constituye un movimiento unilateral.
Desde su llegada a la Casa Blanca, Trump ha mantenido una relación compleja con la Fed y no ha dudado en presionar a sus gobernadores en momentos de desacuerdo sobre la política de tipos de interés y la estabilidad monetaria. Con esta decisión, el presidente vuelve a situar a la institución en el centro de la controversia, en un momento de gran sensibilidad para los mercados financieros.
Por su parte, Lisa Cook ya ha adelantado que no piensa aceptar su destitución “tan fácilmente”. Se espera que en las próximas horas ofrezca declaraciones públicas y que incluso pueda iniciar un pulso legal para defender su puesto.
El impacto inmediato en los mercados aún está por definirse, pero el movimiento de Trump añade incertidumbre a una Reserva Federal que juega un papel clave en la estabilidad económica global. Los analistas advierten que esta crisis institucional podría afectar a la credibilidad de la política monetaria estadounidense en un momento en el que la inflación, los tipos de interés y la confianza de los inversores siguen marcando la agenda internacional.
