Europa abre en rojo: se esfuma el “efecto bancos centrales” y los datos toman el control del día
Las bolsas europeas han iniciado la sesión del viernes con ligeras caídas, después de que el impulso inicial tras las últimas decisiones del BCE y el Banco de Inglaterra se haya ido diluyendo. A partir de aquí, el mercado cambia de “modo narrativa” a “modo dato”: ventas minoristas en Reino Unido, precios industriales en Alemania, confianza del consumidor y referencias de precios en Francia, con un ojo adicional puesto en el frente geopolítico por la comparecencia anual de Vladímir Putin.
Una apertura a la baja… y un mensaje claro: hoy mandan los indicadores
La sesión europea ha arrancado con descensos moderados en los principales índices: el DAX cede en torno al 0,1%, el FTSE 100 se deja cerca del 0,2% y el CAC 40 retrocede alrededor del 0,15%, mientras el Euro Stoxx 50 se mueve también en terreno negativo. El patrón es el mismo en casi todas las plazas: tras digerir la fotografía de política monetaria, el mercado gira el foco hacia la macro “de corto plazo”, la que suele decidir si el crecimiento aguanta o si el consumo empieza a flojear.
BCE y BoE: el mercado deja atrás el titular y mira la letra pequeña
El “rebote” de las últimas horas se ha ido evaporando por una razón simple: el mercado ya conoce el titular… y ahora intenta estimar el siguiente movimiento. El BCE mantuvo sin cambios los tipos en su reunión del 18 de diciembre de 2025, insistiendo en que la inflación debería estabilizarse en el objetivo del 2% a medio plazo. En paralelo, el Banco de Inglaterra recortó el tipo oficial al 3,75%, una decisión que, más que por el recorte, ha llamado la atención por la sensibilidad del Comité (lectura de riesgos y ritmo futuro). En la práctica: el “shock” ya está en precio; lo que falta por decidir es el calendario de 2026.
Traducción para el inversor: si los datos de hoy sorprenden (para bien o para mal), pueden mover con rapidez las expectativas sobre el próximo paso de los bancos centrales y, con ello, la valoración de sectores sensibles a tipos (banca, inmobiliario, consumo, utilities).
Reino Unido: ventas minoristas, el termómetro incómodo del consumidor
Uno de los puntos calientes del día son las ventas minoristas británicas. El último dato publicado muestra que los volúmenes cayeron un 0,1% en noviembre de 2025, tras un descenso más pronunciado en octubre. El detalle importa: cuando el consumo se enfría en plena campaña de fin de año, el mercado empieza a preguntarse si el crecimiento se sostiene por inercia o si necesita más oxígeno monetario.
Si el inversor ve una lectura débil, el guion típico es doble: presión a la baja en compañías ligadas a consumo y, al mismo tiempo, aumento de la apuesta por un ciclo de recortes más generoso del BoE (lo que puede apoyar a tipos largos y a ciertas valoraciones).
Alemania: precios industriales en negativo y confianza que se complica
En Alemania, el foco está en los precios de producción (PPI) y en la confianza del consumidor. El PPI de noviembre ha mostrado una caída interanual del 2,3%, señal de que las presiones en la cadena de precios siguen contenidas en origen. Eso, en términos de mercado, suele interpretarse como “menos gasolina inflacionista” para los próximos meses.
Pero el contrapunto llega por el lado del ánimo del consumidor: las encuestas apuntan a un deterioro de la confianza de cara al inicio de 2026, con un aumento de la propensión al ahorro y menor disposición a gastar. Cuando el consumidor alemán se protege, Europa entera lo nota, especialmente en sectores cíclicos y de bienes duraderos.
Francia: precios de producción y la pregunta clave para 2026
Francia también aporta referencias de precios en la sesión. Para el mercado, el debate no es solo el dato puntual, sino la tendencia: ¿se reaviva la presión en precios industriales o sigue dominando la desinflación? Con el BCE en pausa, cualquier señal de “segunda ronda” (especialmente vía servicios) puede alterar el equilibrio entre “tipos estables” y “tipos otra vez en el radar”.
Geopolítica: Putin, titulares y riesgo de volatilidad
A la macro se suma un catalizador de volatilidad: la rueda de prensa anual de Vladímir Putin. En un mercado especialmente sensible a energía, sanciones y seguridad europea, cualquier mensaje sobre Ucrania o la relación con la UE puede influir en primas de riesgo, defensa, energía y divisas, incluso si los índices solo se mueven “poco” en el primer tramo de sesión.
Divisas: euro y libra, en modo “ajuste fino”
En el mercado de divisas, el euro se mantiene cerca de los 1,17 dólares, con movimientos contenidos pero relevantes para exportadoras y para el sentimiento general de riesgo. La libra, tras el recorte del BoE, alterna tramos de fortaleza y corrección dependiendo de cómo el mercado descuenta el ritmo de nuevos recortes en 2026.
Claves de la sesión: qué puede cambiar el guion
El “mapa” del día se resume en tres palancas: consumo británico (¿aguanta el gasto o se enfría?), señales de precios en Alemania y Francia (¿más desinflación o rebote?) y titulares geopolíticos (¿aumenta el ruido de riesgo?). Con los índices empezando en rojo, la pregunta no es si cae 0,1% o 0,3%: la pregunta es si los datos obligan al mercado a reescribir expectativas para el primer trimestre de 2026.