El G7 exige a Irán retomar la cooperación con la Agencia Atómica y respalda el plan de paz de Trump para Gaza
Los ministros de Exteriores del G7, reunidos en Canadá, instaron a Irán a permitir la inspección completa de sus instalaciones nucleares y pidieron un diálogo directo con Estados Unidos. En su declaración conjunta, reafirmaron el apoyo “inquebrantable” a Ucrania y advirtieron sobre nuevas sanciones contra quienes financien el esfuerzo bélico ruso.
Los ministros de Asuntos Exteriores del G7 —Canadá, Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia y Japón— emitieron este miércoles un llamamiento conjunto a Irán para que retome su cooperación plena con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y permita el acceso sin restricciones a todas sus instalaciones nucleares y materiales sensibles.
En el comunicado final de la cumbre celebrada en Niágara, Canadá, los ministros expresaron su “profunda preocupación” por la falta de transparencia del programa nuclear iraní e instaron a Teherán a “volver a cumplir de inmediato sus obligaciones internacionales”. El documento también incluye un llamado al diálogo directo con Estados Unidos, respaldado por las potencias europeas del E3 (Reino Unido, Alemania y Francia), en un intento por reactivar los canales diplomáticos interrumpidos desde 2018, cuando Washington abandonó el acuerdo nuclear original.
“Hacemos un llamado a Irán para que participe en conversaciones directas con Estados Unidos, con el apoyo de los países europeos, y para que permita la verificación completa de su actividad nuclear”, señala el texto.
El G7 respalda el plan de Trump para Gaza
El comunicado también incluye una referencia explícita al plan de paz impulsado por el presidente estadounidense Donald Trump para poner fin al conflicto en Gaza, respaldado por Washington y varios aliados occidentales. Los ministros instaron a todas las partes a “comprometerse de forma constructiva” con los próximos pasos planteados en la propuesta y a garantizar la seguridad humanitaria en la región.
Fuentes diplomáticas indicaron que, aunque el plan genera divisiones dentro de la comunidad internacional, el G7 busca mantener una posición unificada en apoyo de la mediación estadounidense, en un contexto de creciente tensión en Oriente Medio.
Ucrania, prioridad permanente
En la misma declaración, el grupo reiteró su “apoyo inquebrantable a Ucrania” y exigió un alto el fuego inmediato en el conflicto con Rusia. Los ministros confirmaron su compromiso de incrementar los costos económicos para Moscú y de explorar nuevas medidas contra países y entidades que ayuden a financiar el esfuerzo bélico ruso, una referencia velada a China e Irán, según fuentes diplomáticas citadas por Reuters.
“Estamos incrementando la presión económica sobre Rusia y evaluando medidas adicionales contra quienes faciliten la financiación de su guerra”, advirtieron los ministros.
La cumbre de Niágara se produce en un momento de redefinición de las alianzas geopolíticas globales, con el G7 intentando proyectar unidad frente a los desafíos simultáneos de la guerra en Europa, la inestabilidad en Oriente Medio y el avance nuclear iraní.
El desafío iraní y el equilibrio global
La postura del G7 refleja el creciente temor de Occidente a que Irán avance hacia la capacidad de desarrollar armas nucleares mientras limita la supervisión internacional. El OIEA ha denunciado en varias ocasiones que el país impide el acceso a inspectores y enriquece uranio por encima de los niveles permitidos.
“Si Irán no muestra cooperación total, el riesgo de una escalada regional aumentará significativamente”, señaló el analista Thomas Friedl, del Instituto Alemán de Política Internacional. “El G7 intenta evitar que se rompa definitivamente la arquitectura de control nuclear que ha sostenido la seguridad global durante décadas”.
Con este mensaje, el bloque busca mantener la presión diplomática sobre Teherán, reforzar la unidad transatlántica y proyectar una imagen de liderazgo político occidental en un contexto internacional cada vez más fragmentado.