Accidente militar en zona caliente: un helicóptero y un avión de combate de EE.UU. caen en el mar del Sur de China
La Marina de Estados Unidos informó que un helicóptero MH-60R Sea Hawk y un caza F/A-18F Super Hornet se estrellaron el domingo en el mar de China Meridional en dos incidentes separados ocurridos con apenas 30 minutos de diferencia. Los cinco tripulantes involucrados fueron rescatados con vida y se encuentran en condición estable, según comunicó la Flota del Pacífico estadounidense.
La Flota del Pacífico de Estados Unidos (US Pacific Fleet) confirmó que dos aeronaves militares, un helicóptero MH-60R Sea Hawk y un avión de combate F/A-18F Super Hornet, sufrieron accidentes consecutivos el domingo mientras realizaban operaciones rutinarias desde el portaaviones USS Nimitz en aguas del mar de China Meridional.
El primer incidente ocurrió alrededor de las 2:45 p. m. hora local, cuando el helicóptero Sea Hawk cayó al mar durante una maniobra de vuelo estándar. Media hora más tarde, un caza Super Hornet —también asignado al mismo grupo aéreo embarcado— se precipitó al agua durante una operación separada.
“Los cinco tripulantes implicados en los dos accidentes fueron rescatados y se encuentran en condición estable”, informó la Flota del Pacífico en un comunicado publicado en la red social X.
El organismo añadió que las causas de ambos incidentes están bajo investigación, aunque de momento no hay indicios de actividad hostil o factores externos. Tanto el helicóptero como el caza operaban en una zona de alta tensión geopolítica, donde Estados Unidos realiza patrullas regulares para garantizar la libertad de navegación frente a las reclamaciones territoriales de China.
El USS Nimitz, uno de los portaaviones nucleares más grandes del mundo, se encontraba realizando operaciones conjuntas con aliados regionales cuando ocurrieron los accidentes. Fuentes militares citadas por medios estadounidenses señalaron que los equipos de rescate actuaron con rapidez, desplegando helicópteros y embarcaciones de apoyo para recuperar a los tripulantes.
Ambos aparatos formaban parte del Carrier Air Wing 11, con base en el Nimitz, que actualmente lidera el grupo de ataque del Pacífico Occidental de la Marina estadounidense. Las autoridades señalaron que se realizarán inspecciones técnicas y revisiones de protocolos de vuelo antes de reanudar las operaciones completas.
Los accidentes ocurren en un momento de tensión creciente en el mar de China Meridional, donde Estados Unidos y China mantienen intercambios diplomáticos y maniobras militares paralelas. Pekín reclama la soberanía sobre gran parte de la zona, una postura rechazada por Washington y sus aliados en el Indo-Pacífico, que consideran esas aguas como rutas internacionales de libre tránsito.
El mar de China Meridional ha sido escenario de numerosos incidentes aéreos y marítimos en los últimos años, aunque no se habían registrado dos accidentes estadounidenses tan cercanos en el tiempo desde hace más de una década.
La Flota del Pacífico subrayó que la prioridad actual es garantizar la seguridad de las tripulaciones y determinar las causas exactas de los siniestros. “No hay indicios de que se trate de sabotaje o actividad hostil”, aclaró un portavoz de la Marina, quien insistió en que las operaciones continuarán “con los más altos estándares de seguridad y preparación”.
