Netanyahu anuncia el “gran día de Israel”: el Gobierno aprobará este jueves el acuerdo que pone fin a la guerra en Gaza
Netanyahu declaró que su Gobierno se reunirá este jueves para aprobar el acuerdo con Hamás que pondrá fin a la guerra en Gaza y traerá de vuelta a los rehenes. El primer ministro calificó el momento como “un gran día para Israel” y agradeció a Donald Trump y a las Fuerzas de Defensa de Israel por su papel decisivo en alcanzar este pacto histórico.
Israel vive horas decisivas. El primer ministro Benjamin Netanyahu anunció que su Gobierno se reunirá este jueves para aprobar formalmente la primera fase del acuerdo con Hamás que pondrá fin a la guerra en Gaza y permitirá la liberación de los rehenes israelíes. “Mañana convocaré al Gobierno para aprobar el acuerdo y traer a casa a todos nuestros queridos rehenes”, afirmó el mandatario en un comunicado oficial difundido por su oficina.
El anuncio llega tras meses de intensas negociaciones mediadas por Estados Unidos, Egipto y Qatar, y supone el avance más importante desde el estallido del conflicto. Netanyahu calificó el momento como “un gran día para Israel”, señalando que el pacto simboliza la culminación de “una misión sagrada” para recuperar a los ciudadanos secuestrados. También agradeció el compromiso del presidente estadounidense Donald Trump y de su administración por su papel en facilitar el histórico entendimiento.
Horas antes, Trump había confirmado que Israel y Hamás habían alcanzado la primera fase del plan de paz para Gaza, asegurando que “todas las partes serán tratadas de forma justa”. El presidente estadounidense destacó que el acuerdo representa un paso real hacia el final de la guerra y la construcción de una paz duradera, en un proceso que ha contado con la participación de varios países árabes y el respaldo de Naciones Unidas.
Según fuentes cercanas al proceso, la primera fase del acuerdo contempla un alto el fuego inmediato supervisado por observadores internacionales, la liberación escalonada de los rehenes en manos de Hamás y la entrada masiva de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. Posteriormente, se iniciará una segunda etapa centrada en la reconstrucción del territorio y en la creación de un marco político palestino bajo supervisión internacional, en el que Hamás transferirá la administración a una autoridad transitoria.
El anuncio ha sido recibido con una mezcla de esperanza y cautela. En Israel, las familias de los rehenes celebraron la noticia como un avance esperado durante meses, mientras algunos sectores políticos han expresado dudas sobre las condiciones del acuerdo y su implementación práctica. “No habrá paz real sin garantías de seguridad sólidas para Israel”, advirtieron representantes del ala más dura del gobierno.
A nivel internacional, la noticia ha generado un impacto inmediato en los mercados y en la diplomacia regional. Países como Egipto, Qatar y Arabia Saudí han mostrado su apoyo a la iniciativa, que consideran clave para estabilizar Oriente Medio tras una década de escaladas y enfrentamientos. En Washington, el secretario de Estado, Antony Blinken, calificó el acuerdo como “una oportunidad única en una generación” para lograr una paz sostenible entre israelíes y palestinos.
Netanyahu, que ha enfrentado una fuerte presión interna y externa por su gestión del conflicto, busca con este pacto proyectar una imagen de liderazgo y cierre político. En su mensaje, el primer ministro insistió en que el acuerdo no es una rendición, sino “una victoria moral y estratégica para Israel”. Su objetivo, dijo, es asegurar la devolución de todos los ciudadanos secuestrados, restaurar la seguridad del país y abrir la puerta a una nueva etapa de estabilidad en la región.