Elon Musk podría dejar la dirección de Tesla y sacudir el futuro de la compañía
El futuro de Elon Musk al frente de Tesla vuelve a estar en entredicho. La presidenta de la compañía, Robyn Denholm, advirtió en una carta a los accionistas que el magnate podría renunciar como CEO si no se aprueba su nuevo paquete salarial de 1 billón de dólares, vinculado al rendimiento y diseñado para asegurar su permanencia durante al menos siete años y medio más. La advertencia llega en plena votación para reelegir a tres directores clave y tras un fallo judicial que anuló su plan de compensación de 2018 por “negociaciones indebidas”.
Un paquete histórico con metas casi imposibles
El plan propuesto por la junta incluye 12 tramos de opciones sobre acciones, condicionados al cumplimiento de objetivos ambiciosos: una capitalización bursátil de 8,5 billones de dólares, avances verificables en conducción autónoma total y el desarrollo de robots humanoides funcionales. Si todas las metas se cumplen, Musk podría recibir una compensación que superaría el billón de dólares, la más alta en la historia corporativa.
Denholm subrayó que el paquete “no es una recompensa, sino un incentivo de largo plazo” que busca mantener a Musk al mando de Tesla mientras la empresa acelera su expansión en inteligencia artificial, robótica y energía sostenible. “El liderazgo de Elon es esencial para ejecutar nuestra visión y mantener a Tesla a la vanguardia tecnológica mundial”, señaló.
Riesgo de vacío de liderazgo
La misiva, dirigida a los accionistas antes de la próxima junta anual, advierte que la falta de apoyo al plan podría poner en riesgo la estabilidad directiva de la compañía. “Elon tiene múltiples proyectos de alto impacto —incluyendo X, xAI y SpaceX—, y mantenerlo plenamente comprometido con Tesla requiere un acuerdo competitivo”, escribió Denholm.
El temor a una posible salida de Musk ya ha tenido impacto en los mercados. Las acciones de Tesla cayeron más de un 3 % en las operaciones previas al mercado, ante la incertidumbre sobre el futuro de la dirección ejecutiva.
Un consejo de administración bajo presión
La carta también insta a los accionistas a reelegir a tres miembros del consejo que trabajan estrechamente con Musk, un movimiento que busca consolidar su control sobre la estrategia de la compañía. Sin embargo, la junta enfrenta críticas por su falta de independencia, especialmente después de que un tribunal de Delaware declarara inválido el acuerdo salarial de 2018, alegando que Musk había influido de forma indebida en las negociaciones.
Organizaciones de defensa de los accionistas han pedido una revisión profunda de la gobernanza interna de Tesla, mientras que varios fondos institucionales valoran votar en contra del nuevo plan por considerarlo “excesivo y poco transparente”.
El dilema Musk: genio o riesgo corporativo
Los analistas coinciden en que Tesla enfrenta un momento decisivo. Para unos, Musk es el motor visionario detrás del éxito de la compañía y su avance en vehículos eléctricos, IA y automatización. Para otros, su perfil impredecible y su creciente involucramiento en otros negocios suponen un riesgo de concentración de poder y distracción estratégica.
“Elon Musk es simultáneamente el mayor activo y el mayor riesgo de Tesla”, señaló Dan Ives, analista de Wedbush Securities. “Si se marcha, la acción podría perder hasta un 20 % de su valor en el corto plazo”.
Próxima decisión
La votación de los accionistas se celebrará en las próximas semanas y será decisiva para definir el futuro liderazgo de Tesla. Si el plan no se aprueba, Musk podría ceder responsabilidades ejecutivas o abandonar el cargo de CEO, centrando sus esfuerzos en sus otras empresas tecnológicas.
