Seúl pone en guardia a los mercados de divisas

Corea del Sur amenaza con “acción decisiva” si el won se descontrola en el mercado FX

El Gobierno de Corea del Sur ha lanzado una advertencia contundente a los mercados de divisas. El ministro de Finanzas, Koo Yun-cheol, aseguró este miércoles que Seúl está preparado para tomar “acción decisiva” si la volatilidad del won se dispara y se detectan movimientos desordenados o de carácter claramente especulativo en el mercado de tipo de cambio.

EPA/YONHAP
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Un won “más sensible” que otras divisas

En declaraciones recogidas por la agencia Yonhap, Koo subrayó que el won surcoreano tiende a reaccionar de forma más sensible que otras divisas en episodios de tensión financiera internacional, lo que obliga a las autoridades a mantener una vigilancia especialmente estrecha sobre el mercado.

El won tiende a reaccionar más sensitivamente comparado con otras monedas”, señaló el ministro, apuntando a que los flujos de capital y el comportamiento de los inversores globales pueden amplificar de manera desproporcionada los movimientos en el par won/dólar. Esta característica convierte a la moneda surcoreana en uno de los termómetros habituales del apetito por riesgo en Asia.

Advertencia a los especuladores y a los movimientos unidireccionales

Koo fue explícito al referirse a la posible intervención de las autoridades. “Tomaremos una acción decisiva si la volatilidad se expande de forma excesiva”, afirmó, advirtiendo de que los responsables del mercado de divisas están “observando de cerca” tanto las operaciones de corte especulativo como los movimientos unidireccionales que pudieran distorsionar el equilibrio entre oferta y demanda.

En la práctica, este tipo de mensajes se interpreta como una señal preventiva al mercado: el Gobierno y el banco central no dudarán en utilizar sus herramientas —incluida la venta o compra directa de divisas— si consideran que la cotización del won se está alejando de niveles compatibles con los fundamentos de la economía surcoreana.

Contexto: tipos globales, flujos de capital y riesgo geopolítico

La advertencia llega en un momento marcado por la combinación de varios factores: las expectativas sobre la política monetaria de la Reserva Federal, la evolución del ciclo económico mundial y las persistentes tensiones geopolíticas en la región Asia-Pacífico. Todos estos elementos pueden intensificar los movimientos de capital hacia o desde mercados emergentes como el surcoreano.

Cuando los inversores ajustan sus carteras ante cambios en los tipos de interés globales o en el sentimiento de riesgo, monedas como el won pueden sufrir oscilaciones bruscas. Una depreciación rápida encarece las importaciones y puede avivar la inflación, mientras que una apreciación excesiva puede restar competitividad a las exportaciones, pilares clave de la economía de Corea del Sur.

El delicado equilibrio entre mercado libre e intervención

El mensaje de Seúl refleja la búsqueda de un equilibrio delicado: mantener un mercado de divisas abierto y líquido, pero al mismo tiempo dejar claro que no permitirá episodios de volatilidad extrema que puedan poner en riesgo la estabilidad financiera.

En este sentido, la expresión “acción decisiva” actúa como una herramienta de política en sí misma. A menudo, una advertencia creíble por parte de las autoridades puede ser suficiente para disuadir movimientos especulativos agresivos sin necesidad de ejecutar una intervención masiva, lo que ayuda a preservar reservas y a minimizar distorsiones.

Lo que miran ahora los inversores

Tras el aviso de Koo Yun-cheol, los participantes del mercado estarán atentos a cualquier señal adicional procedente del Ministerio de Finanzas y de las autoridades monetarias surcoreanas. En particular, vigilarán si se producen cambios en los patrones de negociación del won, si se estabiliza la volatilidad o si, por el contrario, aparecen nuevas presiones que obliguen a Seúl a pasar de las palabras a los hechos.

Por el momento, la declaración deja un mensaje claro: en un entorno global todavía incierto, Corea del Sur no piensa permanecer de brazos cruzados si el comportamiento del won se aleja peligrosamente de lo que las autoridades consideran aceptable para la estabilidad económica del país.

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