Tensión al límite entre México y Perú: Sheinbaum desafía la escalada diplomática
La crisis diplomática entre México y Perú intensifica tensiones tras la concesión de asilo político a Betssy Chávez y la reacción firme de Claudia Sheinbaum ante posibles violaciones a la soberanía en Lima.
La relación México-Perú atraviesa un momento delicado, casi una cuerda floja en el panorama diplomático latinoamericano. Todo estalló con la decisión mexicana de conceder asilo a Betssy Chávez, ex primera ministra peruana, que ha generado un terremoto político no menor en Lima. ¿A dónde puede llevar este choque? La presidenta Claudia Sheinbaum se mantiene firme, pero el ambiente está caldeado más que nunca.
El conflicto: un choque de soberanías en juego
La crisis diplomática se profundiza tras que el gobierno de México decidiese otorgar asilo político a Betssy Chávez, acusada en Perú por presunta participación en un intento de autogolpe en 2022. La decisión no cayó bien en el ejecutivo peruano, encabezado por el presidente José Jerí, quien afirmó estar dispuesto a llevar la confrontación hasta las últimas consecuencias.
Este rechazo en Lima ha puesto la mesa para un enfrentamiento sin precedentes. Jerí incluso sugirió que su gobierno podría autorizar la entrada de la policía en la embajada mexicana en Lima para arrestar a Chávez. Una acción que rompió con los protocolos diplomáticos comunes y encendió alarmas internacionales.
Frente a esto, Sheinbaum no se dejó intimidar y ratificó la protección otorgada al asilo político, calificando cualquier ingreso de autoridades peruanas a la embajada como una clara violación a la soberanía nacional y a las normas del derecho internacional.
Contexto histórico y diplomático
Las relaciones entre México y Perú, aunque generalmente pacíficas, han tenido sus puntos críticos, pero nunca un choque tan abierto como este. El otorgamiento de asilo político es un derecho internacional, pero también un terreno escarpado cuando involucra a figuras políticas con implicaciones legales graves.
En este caso, la controversia radica en la interpretación y aplicación de estas reglas, además de la línea fina entre proteger derechos humanos y compartir refugio político con personas buscadas por sus propios gobiernos. Un escenario complejo, sin duda.
Reacciones internacionales y el futuro incierto
No es casualidad que esta situación haya captado la atención en la región y fuera de ella. Expertos en relaciones internacionales advierten que la escalada puede erosionar no solo las ligas bilaterales, sino también la confianza en las instituciones latinoamericanas que sostienen la paz y la cooperación.
Mientras tanto, en las calles tanto de Lima como Ciudad de México, hay quienes ven en esta disputa una batalla simbólica entre soberanía y derechos políticos. Pero, ¿qué ocurre detrás de bambalinas? Los negociadores trabajan contrarreloj para evitar que una crisis puntual escale a un conflicto diplomático mayor.
¿Qué pasará con Betssy Chávez?
Mientras el mundo observa expectante, Chávez permanece dentro de la embajada mexicana, como si el tiempo se suspendiera. Espera un salvoconducto que le permita salir sin riesgo de ser capturada. ¿Serán suficientes las garantías diplomáticas para protegerla frente a presiones políticas tan intensas? Todo es una incógnita por ahora.
Su caso, lejos de resolverse, se ha convertido en símbolo de esta crisis y un recordatorio de que la política a veces se mueve en zonas grises donde lo legal y lo político confluyen y chocan espectacularmente.
