Trump convoca una reunión de urgencia sobre Venezuela tras ordenar el cierre total del espacio aéreo
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebrará este lunes una reunión de alto nivel sobre Venezuela en el Despacho Oval a las 17:00 horas ET, según adelantó CNN. Al encuentro están convocados el secretario de Estado Marco Rubio, el secretario de Defensa Pete Hegseth, el jefe del Estado Mayor Conjunto Dan Caine y la cúpula de la Casa Blanca. La cita llega después de que Trump advirtiera de que el espacio aéreo venezolano debe considerarse “CERRADO EN SU TOTALIDAD” y confirmara una llamada telefónica con Nicolás Maduro, en un contexto de ataques estadounidenses a embarcaciones cerca de la costa venezolana bajo acusaciones de narcotráfico y de vinculación con el llamado Cartel de los Soles, designado por Washington como organización terrorista.
Reunión de alto nivel en el Despacho Oval a las 17:00 ET
Según ha publicado CNN, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presidirá este lunes una reunión específica sobre Venezuela en el Despacho Oval a las 5 de la tarde (hora de la Costa Este). La cita estará centrada en la estrategia de Washington frente al Gobierno de Nicolás Maduro y se produce en un momento de máxima tensión diplomática y militar.
A la reunión están llamados algunos de los principales responsables de seguridad y política exterior de la Administración: el secretario de Estado Marco Rubio, el secretario de Defensa Pete Hegseth, el presidente del Estado Mayor Conjunto Dan Caine, así como la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, y el subjefe de gabinete, Stephen Miller. El formato subraya el carácter de cónclave de crisis y anticipa posibles decisiones de calado.
Espacio aéreo venezolano “cerrado en su totalidad”
La reunión llega apenas 48 horas después de que Trump declarara que el espacio aéreo de Venezuela debe considerarse “CLOSED IN ITS ENTIRETY”, una advertencia directa a aerolíneas comerciales y aviación privada para que eviten la zona. El mensaje, lanzado como aviso de seguridad, se interpreta como un paso más en la estrategia de máxima presión contra Caracas.
El cierre de facto del espacio aéreo implica riesgos adicionales para el tráfico internacional y obliga a múltiples compañías a modificar rutas y planes de vuelo sobre el Caribe y el norte de Sudamérica. Al mismo tiempo, supone un mensaje político dirigido al entorno de Maduro y a los aliados del régimen, al subrayar que Washington está dispuesto a usar todas las palancas a su alcance, desde las sanciones financieras hasta las restricciones de movilidad.
Llamada con Maduro y ofensiva contra embarcaciones
En la antesala de la reunión, Trump confirmó que el domingo mantuvo una conversación telefónica con Nicolás Maduro. El presidente estadounidense evitó dar detalles sobre el contenido de la llamada y, preguntado por los periodistas sobre si el intercambio había sido positivo, respondió: «No diría eso», sugiriendo que el diálogo fue, como mínimo, tenso y sin avances visibles.
En paralelo, Estados Unidos ha estado llevando a cabo ataques contra embarcaciones cerca de la costa venezolana, que el Gobierno norteamericano vincula a redes de narcotráfico. Washington sostiene que muchas de estas operaciones estarían relacionadas con estructuras criminales cercanas al poder político en Caracas, en un intento por cortar rutas y financiación al régimen.
El “Cartel de los Soles” y la acusación de terrorismo
La Casa Blanca y los organismos de seguridad estadounidenses han ido un paso más allá al afirmar que Nicolás Maduro es el líder del llamado Cartel de los Soles, organización que Washington ha designado como grupo terrorista. Con esta etiqueta, la Administración Trump busca reforzar la base legal para sanciones adicionales y operaciones de interdicción en el ámbito financiero y de seguridad.
La acusación implica que cualquier apoyo logístico o económico al entramado señalado como Cartel de los Soles podría considerarse colaboración con terrorismo según la legislación estadounidense. Para Caracas, estas denuncias forman parte de una “guerra híbrida” y de una campaña para justificar una escalada de presión política y militar sobre el país.
¿Qué puede salir de la reunión de hoy?
La gran incógnita es qué medidas concretas pueden acordarse en el encuentro de esta tarde. Entre los escenarios que manejan analistas y diplomáticos figuran:
- Un endurecimiento de las sanciones económicas contra sectores clave de Venezuela.
- Nuevas restricciones al tráfico aéreo y marítimo vinculado al país.
- Una posible hoja de ruta para negociaciones condicionadas con el entorno de Maduro.
- El refuerzo de la cooperación con aliados regionales para aumentar la presión diplomática.
Por ahora, la Casa Blanca mantiene un discurso de firmeza, pero sin confirmar públicamente un salto hacia opciones militares directas. La llamada con Maduro, el cierre del espacio aéreo y los ataques a embarcaciones dibujan, no obstante, un escenario de tensión creciente en el Caribe.
Un nuevo capítulo en una crisis sin resolver
La reunión de hoy se suma a una larga lista de episodios que han marcado la crisis política, económica y humanitaria de Venezuela en los últimos años. Con el país sumido en una profunda recesión, hiperinflación y éxodo migratorio, la confrontación con Estados Unidos añade una capa adicional de incertidumbre para la región.
Mientras tanto, la comunidad internacional sigue dividida entre quienes apoyan una línea dura de sanciones y aislamiento y quienes defienden un enfoque gradual de diálogo. La reunión en el Despacho Oval puede ser un punto de inflexión o un paso más en la escalada. Lo que está claro es que el conflicto venezolano vuelve al centro de la agenda de Washington, con consecuencias potenciales que trascienden las fronteras del país caribeño.

