EEUU intentó comprar al piloto de Nicolás Maduro por 50 millones: el plan secreto que no funcionó
Un informe exclusivo revela que en 2024 Estados Unidos trató de sobornar al piloto de Nicolás Maduro con 50 millones para arrestarlo desviando su avión. La propuesta fue rechazada y la operación fracasó, complicando aún más la crisis en la relación entre Washington y Caracas.
En un episodio que parecía sacado de un thriller político, Estados Unidos habría intentado en 2024 reclutar al piloto personal de Nicolás Maduro, el general Bitner Villegas, con un jugoso soborno de 50 millones de dólares para facilitar su captura. Sin embargo, el plan fracasó rotundamente. Esta noticia, revelada por una investigación de Associated Press, pone de relieve las tensiones persistentes y las acciones encubiertas detrás de la relación conflictiva entre Washington y Caracas.
Detalles de la operación fallida
La estrategia para atrapar al líder venezolano no se limitaba a sanciones oficiales. Según fuentes cercanas a la investigación, un agente federal estadounidense llamado Edwin López fue el encargado de intentar comprar la lealtad del general Villegas. ¿La promesa? Nada menos que 50 millones de dólares para que desviara el avión presidencial hacia territorio estadounidense y facilitar así su arresto.
No obstante, el ofrecimiento fue enfáticamente rechazado. Villegas no solo desestimó la propuesta, sino que bloqueó por completo al agente en las aplicaciones de mensajería, poniendo fin abruptamente a la comunicación. Este rechazo no solo frustró la operación, sino que evidenció la complejidad y los riesgos inherentes a las operaciones encubiertas en el terreno latinoamericano.
Contexto geopolítico y repercusiones
Este incidente no puede analizarse de forma aislada. La trama se desarrolla en un momento marcado por la confiscación, en República Dominicana, de dos aeronaves oficiales venezolanas que habrían sido utilizadas tanto por Maduro como por sus funcionarios más cercanos. Caracas calificó esta acción como un acto de “piratería”, mientras Washington argumentaba que se trataba de una medida basada en sanciones del Departamento del Tesoro.
La revelación pone nuevamente sobre la mesa la compleja y a menudo tensa rivalidad entre ambos países. ¿Es esta una muestra de desesperación por parte de EE. UU. o un calculado movimiento geopolítico? Lo cierto es que estas maniobras alimentan las ya candentes discusiones sobre la legitimidad y la ética de las operaciones encubiertas estadounidenses en América Latina.
Reacciones y el futuro de las relaciones entre EE. UU. y Venezuela
Desde Caracas, la noticia ha reforzado la narrativa de una agresión extranjera constante contra el gobierno bolivariano. El presidente Nicolás Maduro y sus aliados han denunciado reiteradamente intentos de desestabilización patrocinados desde Washington. Por su parte, Estados Unidos permanece firme en considerar a Venezuela como un régimen opresor y un eslabón en la red de narcotráfico regional.
Pero la pregunta que queda en el aire es: ¿qué sigue ahora? Más allá del rechazo a la oferta millonaria, el episodio podría intensificar las tensiones o abrir la puerta a nuevas jugadas diplomáticas y estratégicas. En este tablero, los riesgos son altísimos y las piezas, muy difíciles de mover sin generar consecuencias inesperadas.