Merz frena las expectativas de un acuerdo rápido en Ucrania: desautoriza a Trump
El canciller alemán Friedrich Merz desautoriza las afirmaciones de Donald Trump sobre un acuerdo inminente en Ucrania, subrayando que la paz en el país no llegará este jueves y que cualquier plan debe contar con el consentimiento europeo. Las negociaciones en Ginebra introdujeron avances limitados, mientras la participación de Rusia sigue siendo la condición sine qua non para progresar.
En un giro que ha frenado las esperanzas de una solución relámpago al conflicto ucraniano, Friedrich Merz, canciller alemán, ha dejado claro que no habrá acuerdo para este jueves, tal y como había anticipado el presidente estadounidense Donald Trump. Las palabras de Merz subrayan una realidad menos optimista y más compleja en las negociaciones internacionales sobre Ucrania.
La postura alemana: prudencia y soberanía europea
Durante la cumbre UE-UA en Angola, Merz fue contundente: cualquier plan de paz debe contar con el aval europeo. "No puede haber un plan de paz para Ucrania si no damos nuestro consentimiento a cuestiones que afectan los intereses y la soberanía europeos", sostuvo, dejando entrever que esas cuestiones no pueden ser pasadas por alto ni negociadas a la ligera.
Por lo tanto, la visión alemana desafía ese cortoplacismo que Trump propuso y recalca la importancia de la autonomía europea en un tema tan sensible. La diplomacia, según Merz, requiere tacto y tiempo, no apremios ni fechas límite arbitrarias.
Progresos en Ginebra, pero sin milagros a la vista
En las mesas de diálogo en Ginebra se registraron algunos avances, aunque no suficientes como para dar por cerrado el asunto. Merz reconoció que hubo modificaciones al plan estadounidense, pero no al grado necesario para poner fin al conflicto a corto plazo.
Este hecho pone de manifiesto lo complejo que es conciliar los intereses de las múltiples partes involucradas. Además, hay un paso fundamental que aún no se ha concretado: que Rusia acepte sentarse para negociar.
El obstáculo ruso
Sin la participación activa y comprometida de Rusia, cualquier plan de paz está condenado al estancamiento. Merz lo dejó claro: la negociación será imposible hasta no tener a Rusia en la mesa, lo que indica que los desafíos siguen siendo mayúsculos.
¿Podrá Europa y Estados Unidos convencer a Rusia? La respuesta aún está en el aire, pero el diálogo será indispensable para evitar que esta crisis se eternice.
Expectativas a la baja y pasos pequeños hacia la paz
El mensaje de Merz es explícito: no espere un milagro. "La paz no se logrará de la noche a la mañana", advirtió con un tono que más bien invita a la paciencia y a no sobredimensionar comunicados oficiales.
En días venideros, solo habrá "pasos más pequeños" que servirán para pavimentar, poco a poco, la senda hacia un futuro más tranquilo en Ucrania. A fin de cuentas, la guerra es un monstruo con muchas cabezas.
