Reino Unido y Australia se suman a Canadá en el reconocimiento del Estado palestino
El Reino Unido y Australia anunciaron este domingo que reconocen oficialmente a Palestina como Estado, uniéndose a Canadá en un movimiento coordinado que busca impulsar la solución de dos Estados y mantener viva la esperanza de paz. Londres y Canberra defendieron la necesidad de un alto el fuego en Gaza y exigieron a Israel levantar las restricciones al envío de ayuda humanitaria.
El mapa diplomático hacia Palestina ha dado un vuelco con el anuncio conjunto de Londres y Canberra. El primer ministro británico, Keir Starmer, confirmó que el reconocimiento responde a la urgencia de mantener abierta la vía hacia la paz, insistiendo en que “hay que mantener viva la posibilidad de una solución de dos Estados”. En paralelo, instó a Israel a levantar lo que calificó de “restricciones inaceptables” a la ayuda humanitaria y a poner fin a las “tácticas crueles” en las fronteras de Gaza.
Por su parte, el primer ministro australiano, Anthony Albanese, acompañado por la ministra de Exteriores Penny Wong, señaló que esta decisión refleja el compromiso histórico de Australia con una solución de dos Estados. A su juicio, el reconocimiento busca reforzar los esfuerzos internacionales por alcanzar un alto el fuego en Gaza y abrir espacio para negociaciones serias.
La iniciativa se suma al paso dado por Canadá, configurando un frente coordinado de países occidentales que optan por respaldar explícitamente a Palestina en el escenario internacional. Este movimiento marca una ruptura con la tradicional cautela diplomática en torno al tema, al situar en el centro de la discusión la urgencia humanitaria y la necesidad de un marco político que garantice la seguridad tanto de israelíes como de palestinos.
El reconocimiento llega en un contexto en el que las imágenes de hambruna, violencia y desplazamientos en Gaza han multiplicado la presión sobre los gobiernos para adoptar medidas más contundentes. Al mismo tiempo, plantea desafíos diplomáticos en la relación con Israel, que considera que el reconocimiento unilateral debilita los procesos de negociación.
Con esta decisión, Reino Unido, Australia y Canadá envían un mensaje claro: la paz en Oriente Medio requiere avanzar hacia un acuerdo político inclusivo y sostenible, y el reconocimiento del Estado palestino es un paso necesario en ese camino.