Rubio respalda plan de gas de Trinidad pero advierte sobre Maduro
Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, se reunió con la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, para reafirmar la colaboración en seguridad regional y lucha contra el narcotráfico. Rubio expresó su apoyo al proyecto de gas Dragon de Trinidad, pero advirtió que no debe beneficiar al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, sostuvo una reunión con la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, para fortalecer la cooperación bilateral en seguridad regional y esfuerzos contra el narcotráfico. Durante el encuentro, Rubio destacó la importancia del proyecto de gas Dragon de Trinidad y Tobago como un elemento clave para la seguridad energética de la región, asegurando que Washington respalda la iniciativa siempre que no otorgue ventajas significativas al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
Rubio elogió los pasos que Trinidad y Tobago ha tomado para contrarrestar grupos criminales transnacionales y limitar el flujo de narcóticos y armas en la región. Subrayó que la colaboración en seguridad y energía no solo refuerza la estabilidad local, sino que también contribuye a reducir la influencia de actores ilegales y regímenes autoritarios que amenazan la democracia y la seguridad regional.
Durante la reunión también se abordaron los esfuerzos internacionales para estabilizar Haití. Rubio y Persad-Bissessar revisaron la reciente resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que crea una Oficina de Apoyo de la ONU y una Fuerza de Supresión de Pandillas, destacando la necesidad de cooperación multilateral para enfrentar la violencia y la crisis humanitaria en el país caribeño.
El proyecto de gas Dragon, uno de los más importantes de Trinidad y Tobago, busca expandir la producción y exportación de gas natural en el Caribe, reforzando la independencia energética regional y ofreciendo una alternativa frente a suministros potencialmente influenciados por Venezuela. El respaldo de Estados Unidos al proyecto refleja su interés estratégico en diversificar fuentes de energía y garantizar que estas iniciativas no se conviertan en instrumentos de influencia para regímenes autoritarios.
Rubio enfatizó que la colaboración entre Washington y Trinidad y Tobago debe equilibrar el desarrollo económico y energético con la seguridad regional y la protección de la democracia. La reunión consolidó el compromiso de ambos países de continuar trabajando juntos en proyectos que fortalezcan la estabilidad, promuevan la seguridad energética y combatan la delincuencia transnacional en el Caribe.
