Trump descarta una reelección: dice que "probablemente" no volverá a presentarse
Donald Trump ha declarado que “probablemente” no buscará un tercer mandato presidencial, alegando barreras constitucionales. En una entrevista con CNBC, el actual presidente de EE. UU. deja abierta la puerta a la retirada de la carrera de 2028, aunque reconoce que le gustaría volver a postularse.
En una entrevista con la CNBC, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dejado entrever que “probablemente” no se postulará para un tercer mandato presidencial en 2028. Aunque ha reconocido que le gustaría volver a presentarse, también ha afirmado que su decisión estará marcada por las limitaciones constitucionales.
Sus palabras han sacudido el panorama político estadounidense, abriendo un nuevo capítulo de especulación en torno al futuro liderazgo del Partido Republicano. Si bien aún falta tiempo para las elecciones de 2028, el simple hecho de que Trump se plantee no seguir en la carrera representa un giro significativo para su base de votantes y para sus rivales políticos.
No es la primera vez que Trump juega con los tiempos y los titulares. Su forma de comunicar directa, a veces inesperada, le permite mantener el foco mediático y el pulso de la conversación política. Esta vez, lo ha hecho con una frase ambigua, pero potente: “me gustaría postularme de nuevo, pero probablemente no lo haré”.
Más allá del titular, la mención a “barreras constitucionales” revela el reconocimiento —explícito o no— de que un tercer mandato presidencial en EE. UU. está prohibido. La Enmienda 22 de la Constitución estadounidense, ratificada en 1951, limita a dos los mandatos presidenciales. Aunque Trump ha sugerido en ocasiones anteriores que podría saltarse esta norma —siempre entre bromas o medias verdades—, esta declaración parece marcar una línea más clara.
La reacción en redes y medios no se ha hecho esperar. Mientras algunos analistas interpretan sus palabras como un intento de calmar las tensiones internas en el partido y dar espacio a nuevos líderes, otros consideran que es una jugada estratégica para mantenerse en el centro del tablero político sin comprometerse aún.
Veremos si “probablemente” se convierte en “definitivamente”, o si en los próximos meses su narrativa gira, como tantas veces ha ocurrido. Porque si hay algo seguro en política es que nada está escrito hasta que ocurre.
