De Ucrania a Venezuela: la semana en la que Trump habló de paz… y cerró cielos
La semana estuvo dominada por la guerra en Ucrania, la seguridad en Washington y los giros migratorios y diplomáticos de Estados Unidos, con Donald Trump moviéndose entre el lenguaje de la paz y la amenaza de nuevas restricciones. Mientras se abrían vías de negociación entre Kiev, Moscú y Washington, crecían las tensiones por el cierre del espacio aéreo sobre Venezuela y el frenazo a la inmigración afgana, en un contexto económico marcado por despidos corporativos, auge de la IA y datos macro dispares en Europa y América del Norte.
Ucrania, Putin y Trump: la paz se asoma al guion
El foco político mundial siguió girando alrededor de la guerra en Ucrania. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habló de “progresos” en las conversaciones y, según un responsable estadounidense, Kiev habría aceptado en principio un acuerdo. En paralelo, el presidente ruso Vladímir Putin aseguró que Moscú está preparado para unas negociaciones “serias” con Washington, mientras Trump se mostraba dispuesto a reunirse con Putin y con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski cuando el pacto de paz esté cerrado.
En medio de esta coreografía diplomática, surgieron informaciones que apuntaban a que Trump estaría valorando destituir al director del FBI, Kash Patel, extremo que el propio mandatario terminó negando. También adelantó que el presidente chino Xi Jinping será su invitado en 2026, al tiempo que Zelenski confirmó la renuncia de Andriy Yermak como jefe de su oficina presidencial, un movimiento relevante en el núcleo duro del poder en Kiev.
Seguridad en Washington y giro migratorio tras un tiroteo
La tensión se trasladó a la capital estadounidense después de que dos miembros de la Guardia Nacional fueran tiroteados cerca de la Casa Blanca, con el saldo de un fallecido. La policía identificó al sospechoso como un ciudadano afgano, lo que llevó a Washington a ordenar la congelación de todas las peticiones de inmigración de nacionales afganos.
Trump aprovechó el clima de preocupación para anunciar un endurecimiento general de la política migratoria: prometió una gran ofensiva contra la inmigración irregular, amenazó con “pausar permanentemente” la migración desde países del llamado Tercer Mundo y revisitar determinados tipos de Green Cards. Medidas que, de materializarse, tendrían un fuerte impacto en el sistema migratorio estadounidense.
Cielos cerrados sobre Venezuela y acusaciones de narcotráfico
Otro de los grandes titulares llegó desde América Latina. Trump anunció su intención de “cerrar” el espacio aéreo sobre Venezuela como parte de una ofensiva más amplia contra el narcotráfico y la trata de personas. Aunque en términos legales es Caracas quien tiene la autoridad plena sobre su cielo, el gesto de Washington envía una señal contundente a aerolíneas, pilotos y operadores que sobrevuelan la región.
La escalada culminó con la designación, por parte de Estados Unidos, del Cartel de los Soles –que atribuye al entorno y liderazgo del presidente Nicolás Maduro– como organización terrorista extranjera. En este contexto, se supo que Trump y Maduro habrían llegado a hablar de una posible amnistía si el líder venezolano aceptara abandonar el poder voluntariamente, lo que añade una capa de presión adicional sobre el régimen.
El Papa Leo, Erdogan y un nuevo golpe en Guinea-Bissau
En el plano internacional, el Papa Leo mantuvo un encuentro con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, en una agenda marcada por los conflictos regionales y la situación de los refugiados. Mientras tanto, en Guinea-Bissau, la inestabilidad política volvió a primer plano: los militares nombraron a un nuevo jefe de la junta, y el expresidente Umaro Sissoco Embaló huyó primero a Senegal y posteriormente a la República Democrática del Congo, consolidando un nuevo episodio de crisis en África occidental.
Despidos, IA y cruce de resultados en una semana corta
En el frente económico y tecnológico, la semana –acortada en Estados Unidos por la festividad de Acción de Gracias– estuvo dominada por los despidos y la inteligencia artificial. Grupos como Continental, Telefónica y Allianz Partners anunciaron planes para recortar varios miles de puestos de trabajo en conjunto, reflejando la presión por reducir costes y reorientar negocios.
En paralelo, Kohl’s nombró a Michael Bender como consejero delegado permanente, mientras Amazon comunicaba una inversión de 50.000 millones de dólares en inteligencia artificial para el Gobierno de Estados Unidos. En el ámbito fintech, Klarna sorprendió con el lanzamiento de su primera stablecoin, KlarnaUSD, reforzando el vínculo entre pagos digitales y criptoactivos.
La temporada de resultados dejó nombres como Alibaba, Zoom, EasyJet, Dell y HP, entre otros, en una semana en la que los inversores combinaron lectura de balances con menor volumen de negociación por el festivo.
Datos macro mixtos en Europa y Norteamérica
En datos, Alemania confirmó un crecimiento cero en el tercer trimestre, mientras que Suiza ratificó una contracción del 0,5% del PIB. En contraste, Italia logró crecer un 0,1% y la economía de Canadá se expandió un 0,6%, dibujando un mapa desigual en el G7.
En Estados Unidos, las peticiones semanales de subsidio por desempleo cayeron hasta las 216.000, señal de un mercado laboral todavía resistente, mientras la Reserva Federal publicaba su Beige Book, con una lectura prudente sobre el consumo y la inversión. Todo ello en una semana donde, entre la paz prometida en Ucrania y los cielos cerrados sobre Venezuela, quedó claro que la política y la seguridad siguen marcando el pulso de la economía global.


