"Los mensajes de Lagarde son optimistas, pero Francia y Alemania continúan con problemas graves"

"Los mensajes de Lagarde son optimistas, pero Francia y Alemania continúan con problemas graves"

Lorenzo Coletti, head of Iberia en Pictet AM, comenta que la decisión tomada por el BCE era lo que se esperaba para poder mejorar la economía en la Eurozona.

La quinta bajada de tipos de interés del BCE de 0,25 % estaba bastante prevista. De hecho, la rueda de prensa de su presidenta Christine Lagarde ha estado bastante en línea con lo que se esperaba. Ha indicado que nunca estuvo sobre la mesa bajar tipos en 0,5 %. No nos ha sorprendido que haya indicado que la agenda de la inflación se cumple. Ha sido un mensaje optimista que el aumento de salarios, que hacían la inflación más pegajosa, está poco a poco acabándose. Así que el objetivo de inflación de 2 % para finales de 2025 es alcanzable.

El sector de servicios sigue teniendo muy buenos resultados, aunque el manufacturero e industrial siguen sufriendo. Países como Francia o Alemania muestran al respecto problemas graves, también por cuestiones políticas. En cuanto a exportaciones, el riesgo de fricción geopolítica puede afectar a la demanda global y con ello a la economía europea. De ahí el mensaje de fragilidad de Lagarde y que las decisiones futuras del BCE vayan a depender de los datos.

Lagarde ha sido muy cauta en todas las entrevistas, sobre todo respecto a presidentes de otros Gobiernos u otros bancos centrales. Sin duda, el BCE está a la espera de decisiones de la administración Trump potencialmente inflacionistas que pueden afectar a la economía europea y global. Hasta ahora hemos visto una pequeña parte de tales decisiones, más simbólicas que verdaderamente importantes para el comercio global o con efectos en las decisiones de política monetaria. El caso es que el BCE se va a mantener a la espera.

En todo caso, ha confirmado nuestras expectativas. Nuestra previsión es de cuatro bajadas más de tipos de interés, hasta llegar al 1,75 %. Ha indicado que va a salir los próximos días un estudio respecto al tipo de interés neutral -que no estimula ni restringe la actividad económica-. Puede estar en 1,75 a 2 %. Sea lo que sea, ha indicado que vamos a estar en un entorno de tipos de interés más altos que las últimas décadas.

Pero como gestora de inversiones, tenemos que mirar el tipo de interés real, descontando la inflación, que poco a poco va acercándose a cero o incluso negativo para finales de año. Tiene consecuencias importantes para inversores expuestos a depósitos y mercado monetario que hasta hoy obtenían rentabilidades brutas del 3 %. Va a ser mucho menos en términos reales y hay que empezar a tener que tomar decisiones de inversión, con exposición a variaciones de tipos de interés u otros tipos de activos.