López Milán: “La plata empieza a ganar protagonismo como activo refugio frente al oro”
El CEO de Silver and Gold Patrimonio, Francisco Javier López Milán, analiza cómo la inflación persistente, los tipos moderados en Europa y la incertidumbre económica están transformando las estrategias patrimoniales. Los inversores se inclinan cada vez más por la diversificación y la acumulación progresiva de metales preciosos, con la plata ganando terreno como alternativa al oro.
Francisco Javier López Milán, CEO de Silver and Gold Patrimonio, explica que el comportamiento de los inversores está cambiando hacia fórmulas más prudentes, basadas en la acumulación gradual de metales preciosos y la diversificación.
“Estamos viendo que los clientes prefieren acumular poco a poco carteras de oro y plata, con compras fraccionadas en el tiempo. Además, aumenta la tendencia a diversificar las adquisiciones y no concentrarlas en un único activo”, apunta López Milán.
El directivo subraya que este movimiento responde a una lógica clara: proteger el poder adquisitivo y garantizar cierta rentabilidad a medio y largo plazo. “Las familias buscan productos que les den seguridad, que les permitan conservar valor y que, en un horizonte razonable, puedan generar beneficios”, añade.
Tradicionalmente, el oro ha sido el gran protagonista en el segmento de inversión patrimonial, pero la plata está emergiendo con fuerza. Un metal históricamente ligado a la industria y la joyería está ganando terreno como activo refugio, gracias a su accesibilidad en precio y a su creciente demanda. “La plata está echándole la pata encima al oro en cuanto a apetito por parte de los compradores que buscan un refugio más barato”, destaca.
El perfil del inversor español también ha evolucionado. Frente a un enfoque concentrado en productos tradicionales, hoy se observa un mayor interés por las inversiones alternativas, desde ETFs y certificados hasta activos antes considerados residuales, como determinados metales. “La clave es diversificar. Esa búsqueda de opciones distintas está dando tranquilidad a las familias”, afirma.
En un contexto de posible desaceleración económica, López Milán prevé dos escenarios. En el primero, si se mantiene el empleo, aumentará la capacidad de ahorro y, con ello, la entrada de capital en metales preciosos. En el segundo, si la desaceleración deriva en crisis, el impacto será más generalizado. Aun así, insiste en que el ahorro tenderá a canalizarse hacia activos considerados seguros.
Con el oro marcando máximos históricos y la plata consolidándose como refugio, los metales preciosos refuerzan su papel en la protección patrimonial. “Los inversores no buscan únicamente rentabilidad, buscan estabilidad en tiempos convulsos. Y ahí, tanto oro como plata, tienen mucho que aportar”, concluye López Milán.
